Nací en un hogar cristiano en Guayaquil – Ecuador, en un barrio no tan pobre, gracias a Dios siempre tuvimos un techo, comida y ropa y tuve una buena educación.
Aunque nací en un hogar cristiano y desde siempre asistí a la iglesia, como cualquier otro hombre tenía mis debilidades y pecados. Fue a la edad de 16 años antes de entrar a mi último curso de colegio, en 1999, que vi un documental sobre las profesías de Nostradamus dado que se aproximaba el 2000, como cristiano yo no creia en lo que un hombre podría decir, pero si sabía lo que estaba en la biblia, en el libro de apocalipsis, ese documental me hizo pensar en la venida de Cristo y en cómo me iba a encontrar, un pecador; entonces ese momento me fui a mi cuarto y ore a Dios pidiendole perdón y prometiendo fervientemente que me alejaría de mi pecado y que iría a todos los cultos en la iglesia, a partir de ahí comienza mi búsqueda por conocer más a Dios y servirle. Cumplí mi promesa y cada día leía la biblia, la estudiaba, en total he leído 4 veces toda la biblia de diferentes formas, también asistí a varios cursos en varias iglesias por eso considero saber la palabra de Dios y conocer a Dios.
Desde entonces y hasta ahora la venida de Cristo ha sido un deseo que esta encendido en mi corazón; sin embargo, no puedo decir que siempre ha sido como ahora, han habido etapas en las que me he olvidado y he caido en materialidades y rutinas de este mundo, pero Dios ha sido bueno y misericordioso conmigo, paciente diría yo, y me ha traído de mi maldad a su verdad.
Quizás todo lo que he vivido hace que desee más que otras personas que venga Cristo por segunda vez, quizás tú estés bien, cómodo, con preocupaciones llevaderas, y creas que puedes estar bien en esta tierra al menos por 40 o 50 años más, pero yo no. En realidad quería que Cristo venga antes de que mi hijo cumpliera 5 años, ahora mi hijo tiene 9 y va a cumplir los 10 años, mi hija tiene 7 años y la verdad no quiero pensar en nietos o ver a mis hijos graduarse de la universidad o algo asi, lo que quiero es que en su edad de inocencia sean transformados junto a toda mi familia y amigos y a toda la iglesia de Cristo en el mundo entero para la segunda venida de Cristo.
Mi oración diaria es que Cristo venga, únete a mi oración hermano mío y espera a Cristo cada día que te levantas.